Irapuato, Gto. a 8 de julio de 2025.- El Club Deportivo Irapuato quedaría fuera del próximo torneo de la Liga de Expansión MX, la razón: el conflicto legal sin resolverse con la Asociación Civil (A.C.) propietaria del nombre, escudo, colores, y del estadio Sergio León Chávez.

A la fecha existen dos bando, aunque los dos pretende mantener al equipo en casa, aún no llegan al acuerdo:

• Empresa Healthy People, dueña de la franquicia, rechaza firmar el contrato que establece el pago mensual de 560 000 pesos — 500 000 destinados al mantenimiento del estadio y 60 000 por regalías — alegando que no existe firmeza jurídica en el acuerdo. Su representante, Selomith Ramírez, asegura que está dispuesta a pagar lo acordado, pero no sin un contrato firmado primero
• La A.C. Irapuato, liderada por Juan Manuel Albo, sostiene que Healthy People mantiene un adeudo de 1.2 millones de pesos por 16 meses por el uso del nombre, escudo, colores y del propio estadio. La A.C. afirma que no se han presentado representantes a las reuniones pactadas, y que no hay intención de negociar sin el cumplimiento total de la deuda .

Mientras persista este desacuerdo, el estadio no puede ser usado oficialmente, lo que impide cualquier partido profesional del equipo en casa. Aunque la Federación Mexicana de Fútbol (Femexfut) mantiene abierta la posibilidad de una invitación, también evalúa otras opciones como Alacranes de Durango o Racing de Veracruz si la situación no se resuelve pronto.

Este limbo pone en riesgo no solo la participación del equipo en torneos, sino también la estabilidad de un proyecto deportivo que la afición fresera sigue vigente, pese a sentirse postergada. Como dijo un usuario: “Lo mismo le hicieron al Irapuato hace dos años… el premio fue la desaparición por las ridiculeces de requisitos y un contrato estricto entre la AC y la entonces directiva.”

Este conflicto no es nuevo. Desde 2020, la ciudad enfrenta disputas legales por la administración del estadio y por el derecho de uso del nombre “Club Deportivo Irapuato”. El traslado de franquicias, falta de ascenso y remodelaciones inacabadas han agravado una crisis con raíces profundas en la relación entre directiva, gobierno y afición.

Las voces de apoyo local, tanto del gobierno estatal como municipal, han intervenido buscando una conciliación, pero hasta ahora sin éxito . El reto ahora es que ambas partes lleguen a un acuerdo formal que incluya:

1. Liquidación del adeudo y firma del contrato de uso.
2. Entrega de las llaves del estadio para reactivar obras y mantenimiento.
3. Autorización de nombre, escudo y colores para Healthy People.

Solo así podrá la Trinca volver a la cancha, recuperar su sentido de pertenencia y ofrecer a la afición fresera el espectáculo que tanto añora.